LAS ACCIONES SE HACEN POR VOCACIÓN, NO POR UNA BOCA QUE TE DIGA ACCIONA..

Las promesas deben basarse en acción, no se puede decir haré, sin nunca antes haber hecho; el sentido social no se compra, ni se adquiere con palabras.

El sentido social acciona desinteresadamente y por una fuerza que esta fuera de todo interés económico, nace de un impulso que se llama empatía (ponerse en el lugar de los demás) y crece con actos que van más allá de lo humano que nos sirven para acercar...nos más a Dios.

A esas instituciones que pertenecemos y que lo hacemos de vocación, son las mismas que nos han ayudado en nuestro crecimiento humano y nos sentimos más poderosos cuando nos arrodillamos no para pedir perdón, ni pleitesía al hombre, ni sentirnos derrotados; más bien nos arrodillamos ante nuestro creador y para sostener las manos de un niño necesitado (es ahí cuando somos más fuertes).

Antes de decir “yo quiero ser” debemos indagar en “quien soy”, para cuando se cumpla el “yo quiero ser” saber si actuaste con autonomía o fuiste impulsado por las masas para complacer intereses o llevarle la contraria a quien podía hacer más.

Actúa con tu propia inspiración y acción, si sigues complaciendo peticiones e intereses de otras personas te veras envuelto en los hilos de la ignorancia y la utilización.

Despierta ahora! porque si no reaccionas a tiempo se te complicara muchísimo y no habrá oportunidad para reaccionar y desatar esos hilos...... Solo te restará decir “solo fui un títere más”.