INVERSIÓN SOCIAL O CLIENTELISMO

Por Dannerys Arias R.

La violencia  y la delincuencia en ocasión son una forma de protesta por los muchos que tienen poco en contra de los pocos que tienen mucho (los ricos). Es la manifestación o reacción de los que no tienen nada en contra de los que tienen; aquellos que no tienen oportunidad por las malas políticas publicas en inversión en el pueblo..

Por esto es que el grado de delincuencia aumenta en América Latina, en los países donde existe más desigualdad social y República Dominicana no escapa a esto.

De qué nos vale tener números positivo en nuestra economía, si vemos un país hundido en la miseria y la desigualdad social, comiéndose en la esfera pobre del país, la esperanza de progresar y mantenerse en esta tierra y no emigrar a buscar mejor vida en playas extranjeras; de que nos vale estar en los primeros lugares en turismo y remesas, si existe una brecha económica entre ricos y pobres que cada día si ensancha y agudiza mas.

Y con esto no estoy dirigiendo la culpabilidad al partido de turno que este en el poder esto es un mal social de mucho tiempo; es una cultura económica que tienen  muchos países de América Latina; que data de siglos; cultura económica impuestas por nuestros descubridores que en su momento eran los más Burgueses de la época y los primeros en dilapidar los bienes privados, del estado y la iglesia, y de maltratar a la clase menos pudiente, al punto de convertirlos en esclavos y apropiarse de lo poco que tenían; venimos arrastrando esa cultura desde siglos. Contrario a la administración económica de Inglaterra y Portugal; países también conquistadores de nuestras tierras.

Somos participes de que se cambie la supuesta inversión social actual; que no es más que una política clientelista impuesta por los partidos que todo el tiempo quieren catapultarse en el poder; por una verdadera política de inversión social donde se le enseñe al pobre, no que le den el pescado, sino mas bien se le enseñe a pescar.

Necesitamos un una política de Estado a nivel social que en vez de abrir más planes sociales para dar funditas; se enfoque en solo en ayudar a los niños y ancianos de bajos recursos económicos; ya que somos según barómetro internacional el peor país para vivir cuando se es anciano o niño en América, olvidando los derechos constitucionales enumerados en los artículos 56 y 57 de nuestra carta magna, como es la protección de las personas menores de edad y protección de las personas de la tercera edad, donde el estado debe garantizar los servicios de seguridad social y el subsidio alimentario en caso de indigencia (no como se está haciendo un juego político y una actividad proselitista con las ayudas que proporciona el Estado).

Una política de estado que su inversión social se innove con construir talleres de capacitación técnicas donde a los estudiantes o las personas que incursiones en cuales quiera de estos cursos, se le pague desde el momento mismo de su inscripción y que desaparezcan los subsidios (bonogas, bonoluz, tarjeta solidaridad estudiantil, ect) que es otra forma de dejar escapar fondos del estado para la corrupción y el clientelismo.